El Renacimiento

En la búsqueda de una representación más fiel a la realidad, va formándose la era que se denomina como el Renacimiento. Al contrario de la Edad Media, que intentaba mostrar la importancia bi- dimensionalmente, por medio de la ampliación el Renacimiento crea la buena perspectiva. Dicho esto, en él predominaba la ambición por despegarse del estilo ya predispuesto por los pasados tiempos (lo clásico). Durante esta transición, en la arquitectura, podemos observar como hasta las mismas catedrales fueron renovándose y arquitectos como Donato Bramante y Andrea Palladio se destacan. Las catedrales góticas son conocidas por sus arcos puntiagudos y se decía, que con esta forma se lograría crear una obra grandiosa. Aunque asombrosas, estas catedrales medievales tuvieron sus imperfecciones que las llevaron a ser renovadas y poco a poco, convertirse en parte del estilo renacentista. Sistemas como los contrafuertes flotantes servían para controlar la fuerza de los arcos, evitando que su presión causase su derrumbe, las cadenas de hierro evitaban el colapso de la estructura de la catedral en sí y el techo abovedado, creaba un balance en el peso de la parte superior de los arcos. Estos sistemas, se crearon para así poder preservar estas catedrales que tienen un gran valor histórico y a la misma vez, ayudaron en la anticipación de fallas en futuras estructuras. Arquitectos como Bramante y Palladio, surgieron en este nuevo movimiento. Bramante fue encargado por el papa Julio II para la reconstrucción de la Basílica de San Pedro. Se buscaba la centralidad en los templos, por ello diseñó la planta en forma de una cruz griega, que para él simbolizaba “la perfección”. A finales del Renacimiento, aparece Palladio, quien se convierte en uno de los arquitectos más influyentes en la historia, cuya arquitectura se basa en la sencillez, la proporción y la integración de paisajes. Este comienza a presentar destellos de modernidad al no utilizar ornamentaciones innecesarias y al hacer buena arquitectura, sin la necesidad de utilizar materiales muy costosos, así se comienza a dar nuevo sentido a las formas clásicas estableciendo una unión en la arquitectura clásica con la contemporánea. En conclusión, el Renacimiento tuvo lo mejor de los dos mundos, dejando atrás la Edad Media, se fueron descubriendo más sistemas que llevaron a la futura era del Modernismo. Situaciones como el deterioro de estructuras ampliaron el conocimiento de los diseñadores presentes, los cuales fueron pieza clave para que la arquitectura sea como lo es hoy en día; Por consiguiente, el renacentismo evolucionó las pasadas ideas convirtiéndolas en innovadoras. Mientras tanto, cambiando el sentido de la arquitectura Andrea Palladio y Donato Bramante hacen de este tiempo uno fructuoso.